Jane Birkin · Je t’aime… Moi non plus

Flequillo despeinado y remota sencillez. Apariencia inofensiva, anhelo libertario. Espíritu de éxito, actos de censura.

Suena a Jane Birkin. Y sólo puede ser ella. De ojos que se salen del marco de la expresión, que no se ciñen a la normalidad.

Polémica, escandalosa en cualesquiera de los sentidos, marcó tendencia sin ni siquiera pretenderlo. Alguien que consiguió que de una cesta de mimbre surgiera uno de los must más deseados hoy y siempre, y además lleva su nombre: el inaccesible Birkin de Hermès. Legendario.

Reminiscencias de Jane se dejan ver en la actualidad, cautelosas, aunque más que apreciables. Ella nunca caerá en el olvido. Y así debe ser.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *