El cambio suave

Clarito desde el principio: la camisa que lleva el maniquí de Zara está cogida por detrás. Lleva alfileres. Porque no, no sienta bien. Y ya que estamos, otro secreto; digan lo que digan, el algodón de American Apparel no es bueno.

Si quieres debatir sobre la democratización de la moda y todo eso ve a la Fnac y compra un libro; aquí proponemos soluciones. Dos, incluso: ropa que sí sienta bien y está bien hecha y marcas que entienden la modernidad de forma correcta. La única que existe.

Otra cosa

El cambio suave. O el avance sin partir cada vez de cero. Coge algo que ya exista y funcione y dale la vuelta, adáptalo, mejóralo. Traducimos. Una camisa Oxford entallada, un cardigan de color fluor, un chino desgastado por el sol.

Así sí. Band of Outsiders ha recreado los naúticos de forma que no imaginas. Con imperdibles, cuerdas. Nom de Guerre hace lo que promete su etiqueta, coger ropa militar y adaptarla a la calle. Haversack, que son japonenes, hacen lo propio con prendas de trabajo.

Y son, además, marcas que no se quedan en la superficie. Vender es algo complejo, juegan los sentimientos. Las pulsiones. A.P.C. fue creada por un tipo que estudió para hacer cine; Acne es un estudio global que edita, por ejemplo, Acne Paper, una revista de las de verdad; Opening Ceremony colabora con Wong Kar Wai; es una discográfica que hace ropa como sacada de KitsunéEl Graduado.

Elegante, sí

Ofrecen algo imprescindible, ir vestidos sin estridencias pero con rollo. Un detalle en la costura del vestido, un botón grabado. Carlos Díez mola mucho, claro que sí, pero no todos tenemos trabajos bohemios. “La ropa se convierte en disfraz cuando no puede salir a la calle”. Palabra de Audrey Tautou. Perdón, Chanel.

Y están en ese punto de precio intermedio que tanto nos gusta. Pero siendo realistas. Massimo Dutti no es precio medio, no te engañes. Si te vas a gastar 120 en una camisa hazte un favor: no la compres en Energie.

Pasar notoriamente desapercibidos. Es fácil de recordar. Como seguro estás cansado de leer editoriales de moda donde remiten a números de teléfono imposibles, aquí está el dónde y el cómo:

Guía

-Mini. Está en Madrid, en la calle Limón. Venden Our LegacyPlay y lo de arriba. Tienen un espejo estilo Imperio, a Beirut en el hilo musical y un dueño que sabe de qué va la cosa. Nada de mechas, ropa revuelta, o colas para pagar. Colas para pagar!

Tresbienshop. Lo tienen todo, no hay más que explicar. Envían rápido y fiable. Van a los showrooms, eligen ellos. Poca broma. Para chico y chica, por supuesto.

-Chapeau. Si estás en Valencia te costará encontrar estas marcas. Pero aquí al menos podrás comprar los vaqueros de Acne. Los mejores. Punto. Ten cuidado si vas con dinero: comparten perchas con ropa de Tom Ford y Prorsum.

Algún día llegará alguien que invente algo nuevo, claro que sí. No somos tan osados como para pensar que está todo dicho. Pero mientras tanto, elegimos cambio. Si hasta Coldplay hizo la (supuesta) canción de la década “arreglando” una de Mylène Farmer…

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